•  

22 de Junio de 2015

Conversando con la pediatra Lua Catalá Ferrer

"Muchas personas tienen vivencias y experiencias que no se atreven a contar por no parecer medio locos"

Como sabes, me interesa mucho el mundo emocional que rodea al bebé en el útero y eso se refleja en mi propia historia. Sabrás de qué hablo si ya has leído mi libro.

Por este motivo, me ha parecido interesante incluir en el blog una sección dedicada a conversar con personas y profesionales cercanos al mundo que rodea a bebés, niños y madres, tales como ginecólogos, pediatras, matronas, psicólogos, doulas, profesores, etc…

La primera persona con la que compartiremos diálogo será  la Dra. Lua Catalá Ferrer, mujer, madre de tres hijos, pediatra  y además, algo que tenemos en común: música . Ella es cantante, compositora y pianista y justo ahora, está lanzando un CD con una pieza musical llamada Mantra de la Son (mantra del sueño), para ayudar a inducir el sueño en niños y adultos. He tenido oportunidad de escucharla y su voz es como una caricia para el alma.

Lua ha escrito también el libro Pediatría para los nuevos niños, a través del cual, nos anima a asomarnos a nuevas maneras de percibir la infancia. Según nos cuenta, nuestros niños nos hablan no sólo con el lenguaje, pero hay que estar muy abiertos  a recibir esa información e interpretarla. Después de haberlo disfrutado, te recomiendo su lectura. Es una delicia el amor que transmite por sus pequeños pacientes y sus familias.

LDL. Creo que el mundo emocional del bebé es el gran olvidado cuando una mujer da la noticia de que va a ser madre. Se le pregunta siempre por el sexo o si ya ha elegido el nombre,  si se ha hecho la amniocentesis o qué quiere como regalo para el pequeño. ¿Crees que aún queda mucho para que reconozcamos que tanto el bebé como su madre, pueden necesitar algo más que cuidados físicos?  Quizá la mujer necesite compartir vivencias más profundas, como las conexiones de las que hablo en mi libro

Lua. Creo que afortunadamente, cada vez son más las personas, tanto madres como padres, que perciben este otro aspecto del ser humano, no solo el material. Por lo menos en las personas que yo trato (y tal vez mi entorno es sesgado), siento que son cada vez más abiertos a lo que está más allá del mundo físico, el que percibimos con los cinco sentidos. Por tanto, hay más respeto hacia todo el proceso de embarazo, parto… y más ganas de hacerlo lo mejor posible. Pero lo que sucede es que las ganas a veces no lo son todo y me encuentro con muchas mujeres que se frustran al ver que las cosas no salen como pensaban, que todo se complica y se medicaliza. Y es que el miedo, las resistencias y los programas que llevamos incrustados son muy fuertes si no se trabajan.

LDL. ¿Se abren las mujeres a contarte las experiencias más personales de conexión con sus bebés durante el embarazo? ¿O todavía nos cuesta admitir que existe otro mundo que no podemos percibir con la vista, aunque sí con un sexto sentido?

Lua. Pues mira, yo he descubierto que muchas personas y también niños, tienen vivencias y experiencias que no se atreven a contar por no parecer medio locos. Pero cuando yo sugiero posibilidades, pregunto directamente o notan que pueden explicarme lo que sea sin ser juzgadas me lo explican. Tal vez yo lo propicio, porque como ya digo en mi libro, estamos en una nueva fase evolutiva de la humanidad, donde se produce un salto y cada vez más personas tenemos experiencias que la ciencia que sólo valora la evidencia, no admite como reales. Pero hay otra ciencia, abierta y sin prejuicios que está descubriendo muchos fenómenos difíciles de explicar. Nunca se ha avanzado sin cuestionar las creencias establecidas, las que el establishment  defiende con uñas y dientes. Todos los grandes seres de la humanidad han propuesto cosas que han parecido inaceptables en su época.

"Nunca se ha avanzado
sin cuestionar las creencias
establecidas"

 

LDL. ¿Han llegado algunas mujeres a contarte sueños en los que sus hijos antes de nacer contactaban con ellas para tranquilizarlas o avisarles de hechos que después sucedieron realmente?

Lua. No te sabría decir concretamente ahora si ha sido así, en sueños. Pero sí que me han explicado un montón de anécdotas curiosas e inexplicables, sincronicidades, intuiciones, situaciones que las han hecho despertar y preguntarse. Muchas coincidencias y hechos que tienen que ver con fechas señaladas y cosas de este tipo, pero que casi se viven más como folklóricas que teniéndolas en cuenta para ver qué mensaje traen.

LDL. ¿Crees que los profesionales con los que la mujer está en contacto durante su embarazo, están abiertos a que compartan esas vivencias y a alentarles a comunicarse con sus hijos?  O por el contrario, al mencionarlas quizá se cierran en banda… (Me estoy refiriendo a ginecólogos, matronas, enfermeras, doulas, etc.).

Lua. Me imagino que hay de todo, pero tiendo a ver que sería algo inversamente proporcional a la jerarquía, a más título menos abertura.O sea ginecólogos creo que pocos, matronas creo que hay bastantes más (de hecho la mayoría son mujeres y esto siempre hace que se esté más cerca de todo este mundo sutil) y las doulas, tan criticadas y vapuleadas (habrá de todo, claro), pero creo que son mujeres más cercanas al mundo emocional y espiritual, de hecho su trabajo va más hacia ahí.

Yo di un seminario en Málaga el año pasado y voy a volver este año en diciembre, en un curso de formación de doulas que organiza Susana Olalla y basé mi explicación en el mundo sutil del ser que va a encarnar, basándome en el libro “Los nueve peldaños” de Meurois-Givaudan, porqué creo que es ahí donde hacen más falta, donde su apoyo y comprensión pueden dar una dimensión nueva a un embarazo y parto.

LDL. No sé si te has planteado que la creación de vida obedezca, no a nuestro deseo de ser padres y madres, sino a un plan superior, divino, preestablecido o como cada uno según sus creencias lo quiera llamar...

Lua. No es que me lo haya planteado, es que lo tengo clarísimo, hacemos contratos y pactos con nuestros seres próximos antes de cada encarnación. Por lo tanto, cuando lo miramos desde esta perspectiva, todo toma un sentido diferente y aquella madre o aquel hijo o marido, con quien hay tanto conflicto,está ahí, en tu vida, para servirte de espejo y ayuda en tu evolución y viceversa.

LDL. Creo que tener la creencia  de que tu hijo llega al mundo con un fin, aunque sea no llegar a nacer (o nacer y morir a las pocas horas o días) y vivir solo unos pocos meses dentro de ti, es algo que alivia mucho el dolor de perder a un bebé… ¿Has podido comprobar esto con las mujeres que llegan a tu consulta? ¿Superan unas el dolor mejor que las otras?

Lua. Si, aún cuesta entrar ahí. Sobre todo si es la pérdida de un hijo nacido a término o que muere con unos años de vida. Tal vez es más fácil aceptar un aborto.

Pero en mi caso, por ejemplo, hace poco he estado volviendo a mi pasado familiar y reconectando con la muerte de una hermana que se ahogó a los 3 años en una balsa y que encima se llamaba Maria Ángeles, y fíjate que curioso que nació el mismo dia que mi hija Bárbara, en julio y pocos días después de mi cumpleaños, todas somos elemento agua. Y además murió también en julio. Ahí hay muchas cosas, muchos elementos que observar, todo esto tenía un sentido que he ido viendo, cosas que tienen que ver conmigo y toda mi familia. Ella vino a este mundo para hacer este corto recorrido y con eso aprender algo para su evolución y ayudar a la nuestra. Yo no recuerdo nada posterior a su muerte, ni llantos, ni penas, y creo que ahí bloqueé un dolor que tal vez ahora estoy sanando. Me gusta hacer acciones psicomágicas que diseño, tanto para mí como para mis pacientes y estoy ahora metida en una para todo este recuerdo de mi hermana.

LDL. ¿Por qué crees que hay madres que admiten no sentir nada tras perder un embarazo? ¿Quizá por esa idea tan generalizada de que “aún no era una persona”? ¿O quizá es solo un mecanismo de defensa?

Lua. Si, esa idea de que aún es un trozo de carne que no tiene entidad puede ser un factor pero creo que lo que pasa es que muchas mujeres no quieren entrar en el verdadero dolor que les produce y entonces su mente les va dictando argumentos mecanicistas para esconder estos sentimientos de fondo. Es como que se auto convencen de que no pasa nada. Cuanto más desconectada esté la mujer de sí misma, más fácil es huir de su emoción. Pero muchas mujeres se quedan con una especie de duelo incomprendido, porqué el entorno les dice que no pasa nada, ya tendrás otro….y deciden no expresarlo y vivirlo para ellas mismas.

"Cuanto más desconectada
esté la mujer de sí misma, más fácil
es huir de su emoción"

 

Es bueno hacer rituales para abortos que aún no se han sanado, yo he hecho algunos en pacientes donde este tema estaba ahí, parecía que no pasaba nada, que estaba olvidado, pero no. Hay que honrar aquella alma que un día llego a su vientre para “algo”, conectar con ella y despedirla como toca, reconocerla, aunque haga tiempo. En otras dimensiones el tiempo no existe, así que siempre se puede hacer y produce un gran alivio y mucha paz.

LDL. Alguna experiencia que hayas vivido como mujer y madre o alguna reflexión que quieras aportar como final a esta entrevista…

Lua. Como madre hay muchas, momentos mágicos con mis hijos, aprendizajes de todo tipo, coincidencias, intuiciones.

Con mi hija (26 años) tenemos mucha telepatía y empatía, somos bastante diferentes en algunas cosas pero en otras conectamos mucho.

Mi hijo mayor (29) me enseña lo que es amar lo opuesto, lo diferente. Siempre tenemos posiciones vitales contrapuestas, o casi. Y he tenido que aprender con él a dejar de lado mi ansia de salvadora y entender que cada uno tiene que hacer su camino y tiene sus tiempos.

Con mi hijo pequeño (20) tenemos una gran conexión, es el único que nació en casa, que mamó hasta los 18 meses y se destetó solo, que no está vacunado de nada…y conectamos también mucho por medio de la música.

Cada uno es como es y tiene su función, en el mundo, con su alma y respecto a mi. Pero son seres independientes, compañeros de camino, no son míos. Los honro y los respeto.

LDL. Ha sido un placer tenerte hoy en el blog compartiendo tu experiencia como madre, Lua.
Muchas gracias

Si te gustó esta entrada, comparte en tus redes sociales

Comentarios